Hace tiempo que María me reclamaba un artículo con mis reflexiones como padre porteador, y por fin me he decidido a escribir algo. No voy a contar las bondades del porteo, ya relatadas en otras partes de este blog; voy a contar lo que para mí supone portear.

 

Las sensaciones como padre porteador

Calor

Lo primero que sientes como padre porteador es… ¡calor! Sí, los bebés son como pequeñas estufas portátiles. Debe de ser que las mujeres son más frioleras, porque esa parte no te la cuentan. Supongo que al calor del propio bebé hay que sumar el agobio de colgárselo por primera vez. Hay que decir que, a veces, por alguna razón desconocida, se quejan cuando te los estás colocando, aunque luego se calman. También tienen la costumbre de chuparte la camiseta y lo que sea que uses para portearlos.

Euforia

Al poco, cuando ya ves que no se va a caer y que el bebé va seguro, sientes un poco de euforia, supongo que por el éxito de haberlo conseguido. Pero lo más curioso viene después; te das cuenta de que puedes abrazar al bebé sin tener que sujetarlo. Es difícil de explicar si no lo has probado. Cuando coges a un bebé en brazos no puedes acariciarlo ni abrazarlo porque tus brazos y tus sentidos están preocupados por mantener al bebé a salvo. Cuando no tienes que preocuparte por su seguridad física, eres libre para tocarlo, acariciarlo y abrazarlo como harías con alguien que se mantiene en pie por sí mismo. Para un padre porteador debe de ser lo más parecido a lo que siente una embarazada, salvando las distancias. Muchas veces me veo acariciando al bebé igual que hacen las embarazadas con sus barrigas.

Ternura

También produce mucha ternura; el sentir al bebé contra tu pecho, respirando, totalmente confiado a ti. Dan ganas de besarlo y comérselo. Vamos, a mí me dan ganas. No sé si es por el olor que desprenden los bebés o qué. Además, al estar pegados a ti, ellos también te huelen y seguro que es importante para ellos.

Libertad

Otra sensación fundamental es la libertad que tienes de movimientos y de manipulación. Claro, cuando están en el carrito también… si están tranquilos. Mi experiencia es que cuando están intranquilos y los porteas se quedan como anestesiados. Es más, se duermen bastante deprisa y son más tolerantes a ruidos fuertes y repentinos.

Cansancio

Sí, también cansancio, porque llevar un peso considerable durante un buen rato cansa.  Pero claro, es que cuando porteas al final puedes estar horas, algo que en brazos es impensable. Es un cansancio relativo. Y no es un cansancio agotador, sino más bien un cansancio satisfactorio, como cuando haces deporte. Sacar al bebé medio dormido del portabebés y verlo totalmente relajado, con la piernas y brazos caídos y sin saber dónde está, no tiene precio. Dan ganas de comérselo… otra vez.

Consejos de un padre porteador a otros padres (y madres)

No tengáis vergüenza

Lo primero es que os animéis a portear, lo digo tanto para padres como para madres. Es una experiencia única. La verdad es que se ven muchas más mujeres que hombres porteando, cosa que no entiendo. Si viviéramos en una sociedad de cazadores-recolectores lo entendería, pero en la sociedad actual… No tengáis vergüenza.

No tengáis pereza

Si vuestra pareja portea y vosotros no, al portear también ayudáis al otro; en situaciones en las que esté cansado o que no pueda. Nosotros porteamos uno u otro en función del caso y también usamos carrito. No tengáis pereza.

No tengáis miedo

El bebé va completamente seguro, no se va a caer. ¿Qué mejor protección que ir pegado a vosotros? Cuando porteas y llevas al bebé bien colocado, este pasa a formar parte de tu cuerpo. No tengáis miedo.

Portead lo antes posible

Para finalizar, os recomiendo que lo hagáis lo antes posible, desde el primer día. Primero, por una cuestión psicológica; si te acostumbras a portear desde el primer día es más fácil que sigas porteando cuando el bebé va creciendo. Y segundo, por una cuestión física; es más fácil adaptarse al peso del bebé poco a poco. Si retrasas mucho el porteo te va a costar más porque ya te habrás acostumbrado a que vaya en carrito siempre y porque portear más peso te va a resultar más complicado. Además, el porteo es algo que no sólo sirve para los bebés, sino también para niños creciditos; hasta 27 kg con la mochila (toddler) de la foto. Eso nos permite hacer salidas al campo, por ejemplo, con las dos niñas, y portear a la mayor cuando se cansa de andar. No hay excusa… Portead lo antes posible.