Ver a tu hijo con llagas en la boca y sin comer, es muy duro

Creo que están siendo uno de los momentos más duro de mi vida: ver como bolita quiere comer porque tiene hambre y al probar los sólidos o los líquidos, llora desesperada porque le duele muchísimo las heridas, aftas o llagas en la boca. Cuando ves a tu hijo sufrir por una enfermedad es una situación que le parte el corazón a cualquier madre.
Como siempre pasa, el mejor aprendizaje como pediatra llega cuando la maternidad te hace que pases de la teoría de los libros a la realidad y te das cuenta que muchas de las recomendaciones que damos son muy difíciles de llevar a cabo.
Imagen obtenida de «Eres mi bebe»

¿Por qué se producen las llagas en la boca?

En los niños, la causa principal de las aftas son las infecciones virales. Los virus que más frecuentemente las producen son: el Virus del Herpes Simple (VHS) que produce la gingivoestomatitis herpética, el Coxsackie A16 que produce la enfermedad mano boca pie y el Coxsackie A que produce la herpangina. Todas estas infecciones van acompañadas de fiebre alta.¿Cuál es el riesgo de las aftas orales?
Las aftas orales son muy dolorosas, por tanto el niño no puede comer ni beber. Los riesgos principales son las bajadas de azúcar o hipoglucemia y la deshidratación. Por tanto, lo más importante es tratar el dolor y ofrecer líquidos azucarados. En el caso que sea imposible que tomen líquidos de ninguna de las formas puede ser necesario el ingreso hospitalario para administrar un suero intravenoso.

¿Cuál es el tratamiento recomendado?

  •  Analgesia para evitar el dolor. En este caso no debemos esperar, hay que dar cada cuatro o seis horas y aprovechar la hora después de haber administrado el paracetamol o el ibuprofeno para intentar ofrecer líquido o comida. Si el dolor es muy importante y hay que darla cada cuatro horas analgesia ,probablemente durante varios días, debemos alternar los analgésicos.
  • Ofrecer líquidos: lo recomendable es el suero oral pero es cierto que al tener un alto contenido en azúcar y muchos estar saborizados, puede picar.
  • Anestésico y desinfectancte (antiséptico) local que pueda administrarse en la boca y en caso de niños pequeños puede ser difícil de administrar. Lo mejor es la lidocaina viscosa al 2% pero es un preparado que nos tienen que hacer en la farmacia y los fines de semana no suelen hacer fórmulas magistrales. Existen diversos medicamentos comerciales ya preparados pero no son tan eficaces. En los niños que no puedan entendernos y mantener la boca abierta para aplicar el producto debemos utilizar preparados en gel. Si nos entienden y abren la boca en spray y si son mayores y son capaces de hacer enjuagues, en colutorio.

¿Cuáles son los trucos qué realmente funcionan?

El tratamiento anterior es muy bonito escrito en el papel pero en mi caso fué difícil de hacer, así que mi mamá ya no es pediatra, agudizada por el ingenio de no querer que bolita acabase ingresada con suero hizo algunos inventos. Aquí os dejo mis trucos:
  • Olvida la comida, lo importante es que beba. No ofrezcas nada sólido sino con textura de papilla o triturado, pequeñas cantidades y muy frecuente. No deben estar condimentados ni salados ni muy dulces porque escuece más. La temperatura templada tirando a frío. 
  • El líquido mejor dárselo con pajita si el pequeño puede usarla. En general el contacto con el borde del vaso o la succión que tienen que realizar con el biberón, les duele y no pueden hacerla. Otra alternativa es con jeringa o a cucharaditas si son muy pequeños. Ofrecer líquidos azucarados para evitar la hipoglucemia o bajada de azúcar y que estén fríos.
  • Para aplicar el anestésico local en gel a mi me ayudó ponérselo en una tetina,
  • Los líquidos se pueden congelar y además el frío es un excelente anestésico. Así que en el congelador de casa hay cubitos de todos los colores: de leche, de suero oral, de agua. En los días peores ha sido nuestra salvación.
  • Mimos, muchos mimos. La unión de la fiebre, con el dolor y la dificultad para beber y comer es una mezcla que hace que los peques no quieran jugar, solo desean brazos y muchos mimos de mamá y papá.
  • Busca apoyos porque puede ser agotador.
¡Hemos evitado el ingreso y bolita está casi recuperada!
Si quieres ver cómo actuar ante otras enfermedades visita primeros auxilios para padres.